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Colombia vs Bolivia: hora, TV y lo que está en juego en Barranquilla rumbo al Mundial 2026


Colombia vs Bolivia: hora, TV y lo que está en juego en Barranquilla rumbo al Mundial 2026

sep, 3 2025

Colombia al borde del Mundial; Bolivia, a todo o nada

Hay un dato que pesa más que cualquier pronóstico: Bolivia nunca ha marcado un solo gol ni ha sumado un punto en Colombia por eliminatorias mundialistas. Con esa mochila histórica, la Verde visita Barranquilla en el momento más crítico de su campaña, mientras la Tricolor está a una victoria de sellar el billete a la Copa del Mundo 2026. El balón rodará en el Estadio Metropolitano Roberto Meléndez este jueves 4 de septiembre a las 23:30 UTC (18:30 en Colombia), y el clima competitivo promete estar tan denso como el calor y la humedad del Caribe.

Colombia vs Bolivia llega con la tabla apretada en la zona media. Colombia es sexta con 22 puntos en 16 jornadas y depende de sí misma: si gana, se clasifica matemáticamente. Si empata, se lo jugará todo en la última fecha. Si pierde, sufrirá mirando el resto de resultados. Bolivia, octava con 17 puntos, está en otra pantalla: debe ganar sí o sí para estirar la pelea por el séptimo lugar, el que conduce al repechaje intercontinental. Un tropiezo en Barranquilla la dejaría al borde del abismo.

El presente reciente ofrece lecturas diferentes para ambos. Colombia viene de un 1-1 de mucho oficio en Buenos Aires: golpeó primero con un derechazo de Luis Díaz y aguantó hasta el minuto 81, cuando Argentina igualó. Ese punto pudo ser oro si se sostenía el cero atrás, pero también mostró que la Tricolor compite en canchas difíciles. Bolivia, por su parte, recuperó impulso con un 2-0 frente a Chile en El Alto, en un partido cargado de nervio que resolvió con goles de Miguel Terceros y Enzo Monteiro. Respiró, sí, pero ahora debe salir de su zona de confort: lejos de la altura y ante un rival que le ha sido esquivo décadas enteras.

El historial no necesita adjetivos: en 35 cruces, Colombia ganó 17, Bolivia 8 y hubo 10 empates. En los últimos 10 partidos entre ambos, el registro favorece a los cafeteros por 7-2-1. El detalle que duele en La Paz: en eliminatorias, de visita en Colombia, nunca firmaron ni un tanto. Barranquilla, además, suele exponenciar esa tendencia: calor, humedad, ritmo alto y un público que aprieta sin descanso.

Más allá de los números, el contexto manda. Con seis cupos directos a la CONMEBOL y un séptimo para repechaje, la barrera de clasificación se movió respecto a otros mundiales. Aun así, 25 puntos son un umbral que tranquiliza, y a esa cifra apunta Colombia este jueves. Bolivia, con 17, necesita un cierre perfecto y favores ajenos. La pelea por el séptimo lugar la tiene codo a codo con Venezuela y lo que caiga de la zona media. Es el tipo de jornada donde cada córner, cada despeje y cada amarilla pesan como si fueran una final.

¿Cómo llegan en lo futbolístico? Colombia ha mostrado una idea clara con balón: laterales profundos, extremos que atacan el espacio y centrocampistas con recorrido para sostener presiones altas. Luis Díaz es el foco y desahogo; Jhon Arias aporta pausa y pases filtrados; Jefferson Lerma y otro volante de ida y vuelta (Matheus Uribe, por perfil) equilibran. La duda suele estar en el nueve: el equipo genera mucho por fuera, pero necesita que el delantero central convierta y fije centrales. Si aparece fino, el partido se puede encarrilar pronto.

Bolivia llega con un libreto práctico: bloque medio-bajo, líneas juntas, agresividad en duelos y salida vertical con sus atacantes jóvenes. Terceros y Monteiro se ofrecen al pie y al espacio; Henry Vaca aporta chispa para transiciones cortas; y el mediocampo intenta morder para robar y correr. Su talón de Aquiles en la ruta ha sido la gestión de los minutos malos: cuando encaja un gol, le cuesta estabilizarse. El primer cuarto de hora en Barranquilla será un examen mental además de futbolístico.

El termómetro también cuenta. En Barranquilla, a esa hora, la sensación térmica puede exigir cambios tempranos, rotaciones de esfuerzo y pausas para hidratación. La brisa del estadio ayuda, pero el desgaste es real. Colombia tiene oficio para administrar esos ritmos: acelera por bandas, pausa con James o Arias, y vuelve a cargar cuando ve a la defensa rival larga. Bolivia necesita enfriar, pausar saques de banda y tiros libres, y cortar el juego donde más le conviene. Si entra en el ida y vuelta, lo pagará.

En la pelota parada se esconde otro partido. Colombia domina el juego aéreo con centrales potentes y llegadas desde atrás. Un buen córner puede ser media clasificación. Bolivia, por contra, suele defender en zona con refuerzos al primer palo; si pierde marcas, sufre. Atentos a las segundas jugadas: ahí se definen muchos encuentros en el Metropolitano.

El antecedente más reciente entre ambos en esta eliminatoria dejó cicatriz para Colombia: derrota 1-0 en El Alto. Aquella vez, el impacto de la altura y un gol tardío marcaron la diferencia. En el llano, con humedad y calor, la ecuación se invierte. La Verde, aun así, sabe que tiene una bala de plata: transiciones. Si roba en zona 2 y sale con tres toques, puede pillar a Colombia con los laterales arriba. Si no, le tocará resistir mucho tiempo sin balón.

Psicológicamente, la presión es distinta. Colombia juega para cerrar una puerta que ha quedado entreabierta dos veces. Lleva semanas sabiendo que el boleto estaba a un triunfo y no lo cerró; lo emocional, en noches así, importa. Un gol temprano baja pulsaciones, permite a la grada jugar y a los centrales defender lejos del arco. Bolivia, en cambio, compite contra la historia y el reloj: cada minuto sin sobresaltos es un triunfo parcial. Si llega igualado al descanso, el nerviosismo cambia de camiseta.

Horario, TV y claves del partido

Fecha y hora: jueves 4 de septiembre de 2025, 23:30 UTC.

  • Colombia: 18:30 (Barranquilla, Bogotá)
  • Bolivia: 19:30 (La Paz, Santa Cruz)
  • Argentina y Uruguay: 20:30
  • Estados Unidos (ET): 19:30 | (PT): 16:30
  • España (península): 01:30 del viernes

Dónde ver por TV y streaming (según territorio):

  • Colombia: emisión prevista en televisión abierta a través de Caracol Televisión y su plataforma de streaming.
  • Bolivia: señal de Tigo Sports y aplicación Tigo Sports.
  • Estados Unidos y Canadá: Fubo posee los derechos de las eliminatorias CONMEBOL para estos mercados.

Nota: la disponibilidad puede variar por acuerdos locales y georrestricciones. Conviene revisar la guía de programación de cada operador el mismo día del partido.

Claves tácticas para seguir:

  • El duelo por bandas. Díaz y Arias ante laterales que tenderán a cerrarse. Si Colombia gana línea de fondo con frecuencia, el área se llenará de centros peligrosos.
  • La primera presión de Colombia tras pérdida. Si recupera alto en los primeros cinco segundos, encontrará a Bolivia abierta y desordenada.
  • La salida boliviana. ¿Apostará por pelotazo al espacio y segunda jugada, o intentará juntar pases con Terceros como ancla?
  • El ritmo. A Colombia le conviene partidos de rachas, con picos de intensidad; a Bolivia, tramos largos de control emocional y faltas tácticas que corten la secuencia local.
  • La eficacia. En noches cerradas, el que golpea primero suele manejar el tablero. Un 1-0 temprano obligará a la Verde a cambiar su plan.

Posibles formaciones (orientativas, sujetas a última hora):

Colombia: Camilo Vargas; Daniel Muñoz, Dávinson Sánchez, Jhon Lucumí, Deiver Machado; Jefferson Lerma, Matheus Uribe; Jhon Arias, James Rodríguez, Luis Díaz; Rafael Santos Borré (o Jhon Córdoba como alternativa de área).

Bolivia: Guillermo Viscarra; Diego Medina, Luis Haquin, José Sagredo; Roberto Fernández; Gabriel Villamil, Ramiro Vaca; Henry Vaca, Miguel Terceros, Jaime Arrascaita; Enzo Monteiro.

Más allá de los nombres, el partido se jugará en los detalles. Colombia suele empujar con intensidad en el primer cuarto de hora, bajar una marcha del 25’ al 40’, y volver a acelerar tras el descanso con cambios bien medidos. En ese vaivén, los volantes mixtos son clave: si Lerma recupera alto y Uribe pisa área, el nueve tendrá dos o tres ocasiones claras. James, si está, dará ese último pase que rompe líneas cuando el rival está hundido.

Bolivia tendrá que elegir sus batallas. Defender muy atrás sin salir puede convertir el partido en un bombardeo. La alternativa es un bloque medio con laterales atentos a cerrar centros y mediocentros agresivos sobre el receptor de espaldas. Las faltas lejos del área propia son un recurso; cerca, un riesgo, porque Colombia tiene buenos cabeceadores. En ataque, la Verde necesita que su primer pase sea limpio: si la pelota llega sucia a Terceros o Enzo Monteiro, la transición se corta.

Los duelos individuales inclinan la balanza. Díaz contra el lateral derecho boliviano será un mano a mano recurrente. En el área, Borré o Córdoba deberán convivir con golpes y marcas pegajosas. Del otro lado, la zaga cafetera tendrá que estar concentrada con las diagonales de Monteiro y las apariciones de segunda línea. Un descuido y cambian las sensaciones del estadio.

El banquillo también pesa. Colombia dispone de recambios para mantener la agresividad por fuera y sostener piernas frescas en el medio. Si el partido se atasca, no sería raro ver un punta más físico para fijar centrales o un extremo de perfil vertical para atacar a un lateral amonestado. Bolivia, por su parte, tiene jóvenes con desparpajo que pueden cambiar el ritmo durante 20-25 minutos. La gestión del minuto 60 al 80 suele decidir estas noches.

¿Qué pasa con cada resultado? Si Colombia gana, asegura su presencia en el Mundial 2026. Si empata, llegará viva a la última fecha con margen, pero dependiendo de lo que ocurra en otros estadios para definir si entra directo o si puede caer al séptimo puesto. Si pierde, seguirá con opciones, aunque el margen de error desaparecerá. Bolivia necesita ganar y, además, mirar de reojo el partido de Venezuela: un punto los separa en la carrera por el repechaje. La diferencia de gol puede ser un juez silencioso el próximo martes.

La lectura estadística respalda el favoritismo local: Colombia no solo domina el historial, también convierte más y concede menos que Bolivia en esta clasificación. Las casas de apuestas inclinan la balanza hacia un triunfo cafetero por margen amplio. Pero el fútbol no siempre respeta la hoja de cálculo: si la Tricolor perdona en el área y la Verde resiste con oficio, el estadio puede entrar en un murmullo incómodo que nivele el pulso.

La gestión arbitral y del VAR será clave para que el partido no se descarrile. Mucha disputa, choques constantes y áreas calientes pueden llevar el duelo a una montaña rusa de faltas y revisiones. La concentración a balón parado, la templanza en las protestas y el control de los tiempos valen casi tanto como una ocasión de gol.

Un último punto: la afición. Barranquilla empuja. Cuando el equipo está enchufado, el Metropolitano aprieta de verdad, y los rivales lo sienten. Se espera un aforo muy alto y ambiente de previa mundialista. Para Bolivia, gestionar el ruido será un reto extra: cada recuperación y cada salida limpia debe silenciar la grada, aunque sea por segundos, para enfriar el partido.

En síntesis competitiva, el guion más probable muestra a Colombia dueña del balón, buscando amplitud y centros, y a Bolivia resistiendo y saliendo a toda velocidad. Si el equipo de casa pone la primera ventaja, todo se parece a una noche de celebración. Si la visita aguanta y pega primero, tendremos una montaña rusa hasta el último minuto. A estas alturas de las eliminatorias, el margen entre fiesta y drama es mínimo, y Barranquilla lo sabe.